Ilustre escritor español del siglo de Oro, Luis de Góngora nació en Córdoba el 11 de Julio de 1561 en pleno barrio de la Judería, en el seno de una familia señorial, por lo que desde pequeño tuvo una formación académica importante lo que le llevó a estudiar en la Universidad de Salamanca.
Fue nombrado canónigo de la Catedral de Córdoba en 1585, cargo eclesiástico que le posibilitó viajar por diversos lugares de España y ganar prestigio lo que hizo que el rey Felipe III le nombrara capellán real en 1617. Estuvo viviendo en la corte hasta que en 1627 se tuvo que trasladar a Córdoba por una pérdida de memoria que ya anunciaba la apoplejía que acabó con su vida.
Luis de Gongora y Argote fue enterrado en la Capilla de San Bartolomé sita en la Catedral de su ciudad, Córdoba.
Fue un poeta que definió un estilo, el culteranismo o gongorismo. Este estilo barroco se distinguía por expresar los conceptos de forma muy elaborada, es decir, poner más interés en la forma que en el contenido del que se está tratando, para ello los seguidores de esta corriente utilizan mucho la metáfora, la onomatopeya, el hipérbato, la sintaxis modificada y otras figuras literarias con el fin de que los versos queden en el más alto nivel estético y tengan musicalidad.
Fue muy criticado por un sector de la literatura que era completamente opuesto a las ideas del culteranismo, dicho estilo es el llamado Conceptismo y busca dar mayor importancia a lo que se quiere explicar que a la forma en que se exprese. El máximo defensor de este estilo fue Francisco de Quevedo cuya enemistad con Luis de Góngora fue famosa en el mundo de la literatura de la época y aún no se ha olvidado pues quedaron para la historia esas “rencillas” en los poemas que entre ambos cruzaron como el famoso “Poema a una nariz” que comienza así: “Érase un hombre a una nariz pegado…” y que fue dedicado por Quevedo a Góngora.
En Córdoba, la ciudad de nacimiento de tan ilustre e ingenioso escritor, se le han hecho diferentes homenajes como por ejemplo:
El monumento a Luis de Góngora realizado por Amadeo Ruiz Olmos inaugurado en 1967 y ubicado en la Plaza de la Trinidad justo ante la Escuela de Artes y Oficios de la ciudad califal.
Una calle ubicada en el centro de la ciudad.
Un instituto de enseñanza secundaria que da a la emblemática plaza de las Tendillas, centro de la capital cordobesa.
También hay un teatro en la ciudad califal llamado Góngora por él.
Incluso le hizo un homenaje Julio Romero de Torres pues en su obra “Poema a Córdoba”, un políptico a través del que representa en diferentes cuadros las épocas más esplendorosas de su ciudad natal, coloca en la escena que trata de la Córdoba Barroca, una escultura que representa a Luis de Góngora.
Y aunque pasa desapercibido, pues a pesar de estar en el monumento más emblemático y visitado de la ciudad, es decir, el Conjunto Monumental Mezquita Catedral de Córdoba, ahí también podemos ver un homenaje dedicado al ilustre escritor, pues fue enterrado en la cripta sita en la Capilla de San Bartolomé de la Catedral de Córdoba, pero en el siglo XIX sus restos fueron trasladados a la propia capilla para posteriormente, en 1992, ser introducidos en una sencilla urna, que con el nombre “D. Luis de Góngora” grabado y un relieve con su efigie, está expuesta en dicha capilla para que todo el que quiera pueda visitar donde descansa tan insigne poeta español.
Desde Eventour te invitamos a que no dudes en visitar alguno de estos lugares mencionados y que forman parte del patrimonio cultural cordobés al igual que la figura de Luis de Gongora y Argote.
La imagen de este artículo es el cuadro «Luis de Góngora» de Velázquez